Suspenden a dos funcionarios del Hospital Erasmo Meoz de Cúcuta ante denuncia de Red+ Noticias

Las irregularidades en la contratación para la elaboración de una obra digital con la historia del hospital Erasmo Meoz de Cúcuta, llevó a que la Procuraduría General de la Nación sancionara a gerente y subgerente del centro asistencial. Una denuncia que inicialmente había presentado Red+ Noticias.
Con suspensión de cuatro meses para el gerente del Hospital Universitario Erasmo Meoz de Cúcuta, Juan Agustín Ramírez Montoya, y por seis meses a la subgerente administrativa, Soraya Tatiana Cáceres Santos, la Procuraduría General de la Nación sancionó a estos funcionarios en la contratación de una obra digital con la historia del hospital, para la cual pagaron $ 58'000.000, en plena época de la emergencia sanitaria por el covid-19.
- El mismo día, cuando el presidente de la República, Iván Duque, anunció la cuarentena obligatoria en Colombia, el gerente del hospital Erasmo Meoz de Cúcuta contrató a Guillermo Labrador, un joven historiador, recién egresado, para que hiciera un libro digital sobre la historia de ese centro asistencial, la institución sanitaria más importante de la zona de frontera con Venezuela.
La Procuraduría encontró que el gerente fue quien celebró el negocio jurídico y la subgerente quien suscribió los estudios previos donde debió justificar y evaluar el riesgo del proceso de selección por contratación directa, ya que se había declarado la emergencia sanitaria en el país.
- El ente de control recordó que "según principio de planeación previsto en el manual de contratación de la ESE, la entidad debía tener en cuenta la oportunidad y evaluar el riesgo del proceso contractual para el cumplimiento de las metas y objetivos de la ESE".
Agregó al entidad que “esta instancia tiene claro que los hospitales cumplen diferentes objetivos, empero los principales están relacionados con la prestación de servicios de salud y para el momento de los hechos investigados, en el cual todos los esfuerzos y recursos debían estar orientados a la contención, atención y mitigación de la pandemia ocasionada por el virus covid-19, no resultaba oportuno gastar $58.000.000 para ejecutar un contrato cuyo objeto era la elaboración de una obra literaria relacionada con la historia del hospital”.
La Procuraduría calificó la falta de los disciplinados como grave a título de culpa gravísima por desatención elemental de deberes. No obstante, contra esta decisión de primera instancia procede recurso de apelación.